viernes, 7 de mayo de 2010

Felipe Solá presentó un proyecto para el reintegro del IVA a los asalariados

El jefe del bloque del Peronismo Federal, Felipe Solá, presentó hoy ante la Cámara baja un proyecto para que se reintegre el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los asalariados que consuman alimentos y bebidas con tarjetas de débito y otro para ampliar la asignación universal por hijo.

"Queremos que se les devuelva el 21 por ciento del IVA pagado a aquellos que usaron tarjeta de débito y aquellos que tengan una tarjeta de débito o de un plan social", señaló Solá y resaltó que la "idea es que los consumidores puedan estar cubiertos contra la inflación".


Según explicó, la norma ayudará a morigerar las alzas porque "si suben los precios también subirá el IVA que se les devuelve". En declaraciones a FM Identidad y Radio El Mundo, Solá aclaró que en la iniciativa sólo estarán incluidas las tarjetas de débito y de planes sociales, y sostuvo que el dinero para devolver el IVA "puede salir del aumento de un punto del techo de la soja, de las retenciones".

Una devolución con tope de 150 pesos.

"Es una medida muy popular, muy importante", resaltó Solá sobre la iniciativa que también lleva la firma de los diputados Roberto Mouillerón, Jorge Obeid y Walter Agosto. El texto del proyecto prevé que el monto máximo del reintegro mensual por persona sea de 150 pesos (es decir, compras por un total de 900 pesos) y se ajustará en función de la variación del Salario Mínimo Vital y Móvil fijado por el Consejo Nacional de Empleo, la Productividad y el Salario.

El titular del Peronismo Federal presentó también un proyecto para extender la Asignación Universal por Hijo a chicos que concurren a escuelas privadas. Esa iniciativa plantea que la Asignación por Hijo "pueda ser percibida por todos los niños que lo requieran, de modo tal que el hecho de concurrir a una escuela pública de gestión privada, subvencionada por los estados provinciales, no sea obstáculo para el cobro de dicha asignación".

"Debemos diferenciar las familias que mandan a sus chicos a escuelas privadas con grandes aranceles y que tienen la posibilidad económica de hacerlo, de aquellas otras en las que se hace un gran esfuerzo para mandarlos por sus convicciones religiosas o filosóficas", afirma el texto de la iniciativa.



Fuente: Diario Jornada

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